Detrás de la escena
- Thelma Pérez Reyes
- 30 nov 2015
- 8 Min. de lectura

La cita era a las 10 am, el encuentro fue puntual; Gustavo Fatporn abrió la puerta, estaba recién bañado, vestido comodamente con jeans y una playera, con un ánimo ligero y tranquilo, como si nada fuera a suceder en las siguientes horas. Tal vez para él ya no es algo relevante, y para parte de la sociedad tampoco es tema de escándalo lo que estaba por cocinarse dentro del estudio de Latporn. El director caminó un par de cuadras a un laboratorio para recoger los resultados de los estudios que los actores y actrices deben hacerse obligatoriamente antes de grabar cada escena. Las medidas precautorias de la productora son prioridad para seguridad de cada uno de los profesionales que trabajan con ellos; Fatporn pide siempre análisis completos: estudios de sangre, prueba de hepatitis y ETS. Recogió lo resultados y se dirigió de nuevo al estudio en donde se grabarían las escenas del día.
El estudio no es muy grande, tampoco es moderno o equipado, es un departamento con lo necesario para grabar diversas escenas con tramas diferentes. Una televisión enorme sirvió como el mayor centro de entretemiento antes de empezar con "la acción". El fotógrafo, Omar, ya estaba ahí, sentado en la sala viendo su celular, serio pero amable. Fatporn encendió la tele y puso música; la música acompañó todos los momentos de descanso. Desde Gorillaz hasta Oasis, algunas canciones de rock, en total pasaron más de 30 canciones en las horas que duró la grabación.
Se hicieron dos secuencias diferentes con los mismos actores: Luna, una actriz nueva en la industria y Fatporn, uno de los actores más experimentados, quien también se encargó de dirigir. La simple idea de un maestro del sexo enseñando a una novata cómo se hacen las cosas fue un plus, fue como ver a un lobo acechando a su presa hasta arrinconarla; un hombre excitando a una mujer hasta obtener el mejor orgasmo a cuadro. Un rato después tanto el director como el fotógrafo empezaron a preparar el primer set: la recámara. Sacaron maletas con su equipo de iluminación que constaba de varios focos de luz blanca muy potentes, un par de lámparas fotográficas y una cámara Canon 7D con un micrófono. En cuestión de minutos el lugar ya estaba preparado para grabar, haciendo notorio que saben perfectamente su chamba y los años de experiencia haciendo videos.
Luna llegó a las 10:30 am aproximadamente con una maleta pequeña en el hombro, no era la típica actriz con cuerpazo, tenía grandes pechos, una cintura pequeña y grandes caderas, más cercano a muchas de las mujeres latinas y no a la idea de mujer americana, era jóven, 25 años a lo mucho, callada y nerviosa, a punto de perder su "virginidad" como actriz porno. Se sentó en la sala, y empezó a platicar con Fatporn. El director le hacía preguntas para que la acriz se relajara un poco, no podía verse tensa en la cámara; el lobo llevando a su presa al lugar que le conviene, en el que la necesita para poder atacar. En la charla Fatporn le dio un par de tips para verse mejor a cuadro "estírate lo más que puedas", "acuéstate de ladito", etc. y de la maleta que llevaba sacó algunas prendas para decidir la ropa que usaría: un vestido pegadito. Leyeron las pruebas médicas para asegurarse de estar limpios, cotorrearon un poco más, Gustavo siempre llevó las riendas de la plática. Al paso de los minutos Luna estaba más cómoda y el decidió que era momento de iniciar la grabación.
Fatporn se sentó en la orilla de la cama con Luna a su lado izquierdo y el fotógrafo frente a ellos, el primer video sería como un casting, no habría personajes ni historia, simplemente Fatporn y Luna desinhibidos frente a la cámara. ¡Acción! El actor inició hablándole a la cámara y presentando a Luna, exudaba confianza y tranquilidad, pero en su forma de ver a la actriz se notaba lujuría, como si tuviera un switch que al momento de iniciar el rodaje hubiera cambiado de apagado a encendido. Luna seguía nerviosa, respondía con monosílabas las preguntas que Gustavo le hacía, pero empezó a abrirse más cuando las preguntas subieron de tono: "¿Qué es lo más cañón que has hecho?", "¡Qué ricas chichis¡", entre otros comentarios cachondos mientras Fatporn sacaba los senos de la actriz del vestido.
Empezaron a perder la noción de la cámara, comenzaron los besos y el manoseo sobre la ropa. Luna cerraba los ojos (puede ser para no ponerle atención al fotógrafo que estaba ahí) y disfrutaba de lo que su compañero estaba haciendo. Fatporn empezó tocando y besando sus pechos, satisfecho con los pequeños sonidos que hacía la actriz, que seguía un poco tímida y contenía sus emociones y gemidos. La recostó en la cama y como un experto sabía que hacer para relajar a la actriz: sexo oral. Mientras hacía esto Luna se soltó más, se dejó llevar por el placer y sus sonidos aumentaron de intensidad, el objetivo del lobo se estaba cumpliendo poco a poco. El nunca dejó de hablarle, de dirigirla, de decirle cosas que la excitaran más; después de unos minutos Gustavo decidió cambiar la dinámica y que "le regresara el favor", así que el turno de hacer lo propio era de Luna.
Luna estaba mucho más relajada e hizo su trabajo como una profesional, disfrutando la acción y dejándose llevar por el experimentado. Los sonidos de Fatporn eran más intensos y sin inhibición, no dudó en decirle a su compañera cómo le gustaba que hiciera las cosas, este desenvolvimiento sin duda viene con la práctica. Era hora de pasar a "lo bueno", después de todo la preparación que hicieron y con Luna más segura y relajada, la acción se dio de manera muy natural, con un desenvolvimiento de ambos actores más fluido, los sonidos guturales más fuertes y continuos, repasando varias posiciones hasta que Fatporn, el lobo, logró su objetivo, un orgasmo intenso que quedará grabado, seguido por su propio orgasmo. El primer video que duró alrededor de veinte minutos fue un éxito.
Fatporn se levantó de la cama y se sentó en un sillón, se notaba cansado pero mantenía su buen humor, Luna se acomodó el vestido y se unió al actor y al fotógrafo que ya estaba en la sala. Gustavo puso música de nuevo y comenzó una charla con todos los presentes mientras se vestía de nuevo. Hablaron de la escena, le preguntó a la actriz cómo se había sentido, le dio nuevos tips y siguió bromeando, pero siempre trató de integrar a Luna para que se siguiera soltando y entrara en confianza. Después de unos minutos prendió el boiler y le dijo a Luna que se bañara mientras ellos iban a la tienda por agua y comida en lo que empezaban la siguiente escena.
En el caminó Gustavo comentó que sintió a la actriz un poco tensa, pero que eso era normal al ser su primera vez, en el casting que le hizo previamente la experiencia fue similar. Habló con Omar sobre las mejoras que la actriz puede tener: bajar un poco de peso sobre todo, cosa que ya habían charlado con ella el día de su casting. Fuera de eso el fotógrafo y el director vieron a una chica que de ser dedicada y profesional podría tener buen futuro, aunque el camino por recorrer sería bastante largo aún. Regresaron al estudio, Luna ya estaba bañada vestida con la ropa con la que llegó, Gustavo se volvió a sentar un rato para relajarse, tomó un Gatorade y la música seguía escuchándose en el departamento. Al cabo de unos minutos se metió a bañar, mientras la actriz fumaba por segunda vez, de nuevo se notaba tensa.
Gustavo salió del baño con la misma expresión que a las 10 am, con ánimo y muy tranquilo, sonriente y bromista. Mantuvo una charla con todos durante unos minutos y después de casi dos horas de descanso decidió dar inicio a la preparación del segundo set: la sala. Movieron muebles y reacomodaron la iluminación en minutos, posteriormente se sentó con Luna y le explicó de qué iba la segunda secuencia: Fatporn sería el jefe de su papá, quien que nunca va a trabajar, por ello decide ir a su casa para reclamarle y correrlo de su trabajo; Luna haría todo lo posible para que el jefe no corra a su papá. Esa fue la instrucción, sencilla pero dando perfectamente la idea de debía ser cada personaje y permitiendo improvisar sobre la marcha.
Se inició la escena, requería mucho más trabajo por parte de ambos actores, tenían que hacer la secuencia creíble. El primer minuto fue la introducción a la situación, Fatporn gritó molesto pidiéndole a Luna que llamara a su papá para correrlo; Luna con una voz seductora le pidió que no lo corriera a cambio de lo que quisiera, mientras tocaba al actor por encima de la ropa. El estado de ánimo cambió completamente, Fatporn volvió a ser un lobo y la actriz una liebre indefensa, entrando en personaje y haciendo creíble la historia. Fatporn no dejó de decirle cosas sucias desde ese momento hasta el final de la grabación, todas haciendo alusión a la trama: "¿Tú papá sabe que estás haciendo esto?", "¿Estas desesperada por salvar el trabajo de tu papá?", "Ojalá tu papá viera como te coges a su jefe", etc.
El sexo en esta escena fue diferente que el de la primera, menos controlado, más salvaje e instintivo. El actor dominaba completamente a Luna, la movía en las posiciones que quería, el fotógrafo siguió de cerca cada una de los movimientos, enfocándose en ella mucho más que en el. Luna estaba doblada en el descansabrazos del sillón y Fatporn detrás de ella, pero cortó la escenaen ese momento porque se estaba lastimando en esa posición. Como en cualquier producción se tienen que hacer cortes para lograr dar un buen producto al público y que no se vea de mala calidad, pero cuidando que los actores siempre estén bien y cómodos. Arregló la posición de la actriz en el mismo descansabrazos y reanudaron la grabación.
Fatporn en un minuto se sintió cómodo de nuevo, pero Luna estaba incómoda aún, por lo que sus gestos y movimientos no eran los mejores. El actor cortó de nuevo la escena y cambiaron de posición completamente, se empezó a rodar de nuevo, la naturalidad y lujuria de ambos regresó, y otra vez empezó el sexo, las frases sucias, los besos desesperados, nalgadas y gemidos. Así siguió Fatporn sentado en el sillón con Luna encima de el durante casi media hora, hasta que de nuevo Luna terminó con un orgasmo intenso que la cámara capturó. Después salió de su estado de éxtasis y Fatporn la estaba esperando para llegar a su orgasmo también, un minuto después la escena había terminado y el día de rodaje finalizado.
Acabaron de vestirse de nuevo y guardaron el equipo, Fatporn sacó los documentos que Luna debía firmar para permitir la difusión de los videos grabados, los cuales leyó cuidadosamente. El actor comentó que no solo es hacer videos y ya, sino que hay un proceso detrás de eso tanto en producción como en documentación, ellos deben estar protegidos en caso de malentendidos. Cada actor firma cesión por cada día rodaje y recibe su pago al corte, cuando terminaron el proceso Fatporn y Omar acompañaron la actriz a la puerta, el primero le comentó de su siguiente grabación, que sería en dos días con otro actor y la despidieron con un abrazo.
Así fue como Fatporn y Omar hacen todos los videos que se ven en Latporn.com cada semana, con profesionalismo y un ambiente amigable, tratando con respeto a sus actores, buscando que estén cómodos y que den todo el potencial que tienen para que a la gente guste lo que ve, para beneficio de la productora y de los mismos actores, como comentó Omar. Cinco horas en el día dedicadas al sexo y a producir con calidad, siempre con visión de mejorar en el futuro para sus suscriptores. Después de eso el día siguió su curso normal: comer con la familia y los amigos, tal vez ir al cine, salir a pasear, al final el porno es como cualquier trabajo y eso se aprendió de esta experiencia.
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